¡Sorpresa, sorpresa!

Acompáñame... ¡te sorprenderás! ¡Una noche con tantas sorpresas que no olvidarás jamás! nana nino naaa ¡Sí, sí! Al más puro estilo Isabel Gemio en Sorpresa Sorpresa, así me sentí el otro día.

 Era un martes cualquiera de mi ajetreada semana, volviendo del masajista, cuando recibo un "whats up" preguntando si estoy en casa. Mi queridísima y mentirosilla amiga Mireia me dice que si puede pasar a pedirme una cosa un momento, e inocente de mi le digo que ningún problema, ¡faltaría más!

Llaman al timbre, y por la cámara veo como ella pasa para adentro, pero extrañamente se queda aguantando la puerta 10 segundos más. Entonces, una sombra agachada cruza rápidamente ¿eing? ¿quien más ha venido? ¿por qué se esconde?

 Y cual es mi sorpresa al abrir la puerta ¡cuando veo aparecer a Mireia acompañada de su madre! Pero eso no es lo más fuerte de todo, no, no, no... Vienen acompañada de una bonita caja en forma de corazón (ahí ya me cautivaron, a mi es que los corazones me ablandan). 

 Me explican que tienen que darme éste regalo ya, y que no puede esperar más. Que cuando lo abriera descubriría porqué (mi cara de póker en ese momento... hasta llegué a pensar que me habían metido un animal dentro de la bonita caja).

Peeeeeero cual es mi sorpresa cuando al abrir la caja, no veo ningún animal (menos mal) sino que veo aparecer mágicamente... 

¡¡¡Síiii!!! ¡Son ellos! ¿Los reconocéis? ¡Son los novios que quería!

 Pero lo más requetefuerte de todo es... ¡que los tiene comprados desde verano! Así que cuando Mireia leyó el post de las figuras de novios en el blog le dijo corriendo a su madre que tenía que darse prisa en dármelos, sino acabaría comprándomelos en breve...

¡No sabéis la ilusión que me hizo! No recuerdo muy bien, pero creo que pegué algún saltito y no podía dejar de aplaudir (en fín...) ¡Me gustó tanto, tanto, tanto, taaaaaaanto la sopresa!

Así que aprovecho la ocasión para darte de nuevo las gracias, Lourdes, por este GRAN detalle que has tenido. Que sepas que me ha encantado que pienses en mi y que hayas acertado de pleno con lo que me gustaba. ¡Ole, ole y ole!