... Time to relax... in Puigcerdà!

Sábado 10 de marzo, 9'00h

Estoy a un 98% segura de las destinatarias del mensaje secreto que recibí el miércoles, pero aún tengo dudas y por eso estoy muy pero que muy nerviosa. Imaginaos la situación, yo en medio del comedor, ahora me siento, ahora me levanto, ahora me siento, ahora tengo pipi de los nervios, ahora miro el reloj, ahora me vuelvo a sentar... y así hasta que de tanto esperar y esperar ¡desespero! Así que decido aprovechar el tiempo y ponerme a etiquetar unas cosillas de la boda.

10'00h Suena el timbre de casa ¡por fin! Aparecen dos individuas con cara de... ¡mi cara! ¡Son dos Fany's! Mis queridas sospechosas son las delincuentes organizadoras del cotarro, ¡las responsables de tantos nervios pasados desde el miércoles!

 Me revisan la maleta de arriba a abajo, y me hacen cambiar tooodo su contenido. Ya os podéis imaginar lo que llevaba en la maleta... dos vestidos preciosísimos, ¡dignos de la más glamurosa despedida! Pues no, resulta que no me harán falta, resulta que tengo que escoger un par de looks montañeros porque nos vamos a los Hamptons (paraíso de los neoyorquinos) a pasar un fin de semana de relax total.

 Después de un desayuno rapidito y un cafelete, ¡nos ponemos en marcha!

 ¿Dónde? Ni idea. Durante el viaje, me hicieron taparme los ojos varias veces para que no pudiera ver los cartelitos. Hasta que por fin llegamos a un sitio al cual tuve que llegar andando sin poder mirar, y atención lo que vieron mis ojos cuando me destapé:

Pero si esto os ha parecido precioso, esperad a ver que había al lado de este magnífico lago...

EL MEU PALAU DE PRINCESA!

¡Mis damas de honor me habían comprado un palacio de fin de semana! jajaja ¡Digna de una princesa de verdad! Bueno comprado, comprado, lo que se dice comprado no, pero hemos podido disponer de una de sus habitaciones durante el fin de semana.

Hemos comido con la compañía de la Abeja Maya que nos ha hecho saltar para ir quemando las calorías del bocadillo, hemos callejeado por las rústicas calles de Puigcerdà, tenemos todas unos posa-vasos monísimos de la muerte a conjunto, nos hemos remojado en el spa hasta que los dedos "semejantes garbanzos arrugados" han dicho basta, nos hemos puesto monísimas como antiguamente hacíamos para ir de fiestuki a la hermética, hemos cenado en el restaurante de un cocinero que desprende amor por su trabajo por los 4costados (donde hemos visto en vivo y en directo como se hacían los tallarines que nos comimos),

hemos bailado los hits de la temporada, hemos visto meneos de pies, bengalas y globos, hemos descubierto el secreto que esconde la Cerdanya, pero sobretodo ¡nos hemos reído hasta no poder más!

MOLTES GRÀCIES TATANETES MEVES PER AQUEST CAP DE SETMANA INOBLIDABLE!!!