¡Marchando una de invitaciones!

Hace ya meses que se están cociendo, pero todo plato exquisito requiere su preparación y su debido tiempo de cocción. Así que después de un tiempo de reposo bodorril, ayer nos juntamos mi amiga Mónica y yo para acabar de darle forma a "La invitación" ¡uauu! (que bien suena).

 Entre café, risas y pantones acerezados las dejamos casi casi listas. Aún queda ultimar algunos pequeños detalles, pero si todo va bien la semana que viene se irán para la imprenta... ¡madre mía que emoción! ¡Será como parir a una dulce criatura! jajaja

Ya sé que ayer se lo dije un par de veces, pero no son las suficientes, así que aprovecho para volver a dar las gracias a esa súper Diseñadora Gráfica.... tururururururunnnn (redoble de tambores): ¡MÓNICA! ¡Esa Mónica, como mola, se merece, una ola! ¡uoooooo! (te recompensaré con un cuadro, que sé que lo quieres jajaja)

Y aquí doy fe de ese curro que nos estamos pegando para que queden delipendas y estuciosas!

Casaderos viajeros, destino: Galicia

¡Sí, sí, sí! ¡Aquí estamos porque hemos venido! ¡en los Madriles! No ha sido un día muy productivo que digamos, solo ha sido un día de impás hasta llegar a tierras gallegas. Con una calor de infarto y peregrinos a doquier pateándose cada cm de Madrid. Porque.... ¡oh, no! hemos venido coincidiendo con la visita del Papa... así que imaginaos como están las calles, llenas de jovencitos JMJ (un poquito disfrazados porque parecen boyschouts).

 Nosotros como buenos turistas nos hemos sentado en una terracita y hemos disfrutado de un riquísimo Starbucks

 

Después de mucho pasear y pasear, hemos descansado un ratito en el hotel y ¡ala! ¡otra vez a la calle! Un bocadillito en el Pans (que simples, ¿verdad?) y como el hotel lo tenemos a 1 minuto de la Puerta del Sol, para allí que nos hemos ido a chafardear un ratillo. ¿Qué nos hemos encontrado? A parte de mucho turista, la Asamblea de Indignados del 15M debatiendo sobre la JMJ... Y evidentemente una patrulla de polis a la espera por si se liaba la cosa.

En fin, como que yo no me entero mucho del asunto y hay otros que han quedado a las 22h con 11 chicos que dan patadas a una pelota (perdón por los que amáis el fútbol, pero es otra cosa de la que no me entero) pues para el hotel que nos hemos ido.

¡Ah, por cierto! ¡Hemos visto al Doctor Mateo! ¡Sí, sí! El de la serie "Dr. Mateo". Cuando el Juanka me ha avisado ya ha sido tarde y le he hecho una foto de espaldas, pero bueno ahí va la prueba:

Pues eso, intrépidos lectores jajaja los casaderos viajeros se despiden por hoy. ¡Mañana más y mejor, seguro! Lo que no llevo tan bien es tener que madrugar tanto -_-' aix...

Habemus ecclesia

¡Pues sí! ¡Habemus ecclesia! ¡Ya veis que lejos nos la hemos buscado! Mejor, así podré vigilar que todo vaya sobre ruedas desde la ventana (Ha Ha Ha risa de malvada) Hasta que yo no vea que el novio ha llegado y ¡ha entrado! (así me evito un humillante abandono en el altar) y que todos los invitados han entrado, ¡no salgo de casa! ¡me niego! jajaja

 Como comprendereis, alquilar un bonito coche antigo color crema (como me gusta, aix...) es una tontería ya que no me va a dar la vuelta a la manzana inútilmente, así que apreciados y amables invitados, os invito a colocar una alfombra roja que vaya de la puerta de casa de mis padres a la iglesia, para hacer el paseillo sin ensuciarme el vestido ;)

Y sobre el tema iglesia hay una anécdota (aún por resolver) que todo aquel que me conoce y alguna vez ha tenido que aguantar mi chaparrón bodorril, recordará sin lugar a dudas. Yo que soy una chica muy apañá, tenía muchas muchas cositas pensadas y preparadas para la boda. Pero lo que todo el mundo me decía era... Pero como puede ser que lo tengas casi todo y ¡¡¡aún no tienes cura!!! Pues si, de hecho eso es lo que hay, a las alturas que estamos y aún no tenemos cura.

 El día que fuimos a la iglesia a pedir día y hora para la boda, pedí si me podía casar un cura que me hacía muchísima ilusión, y el mosén sin ningún tipo de problema, me dio su número de teléfono para que lo llamara. Y ahí viene el QUID de la cuestión HA - HA - HA. ¡Tenía que llamarlo! ¡Oh no! Odio llamar a los sitios, ¡me pongo muyyy nerviosa! (no soy una persona muy telefónica, todo hay que decirlo). Y así fueron pasando los días, las semanas, los meses... y yo sin llamar al cura. ¿Pero qué le digo? ¿Pero como lo hago? ¿Pero, pero, pero?

Mis amigas siempre que me veían me decían: ¿Ya has llamado al cura? ¿Ya has llamado al cura? ¿Ya has llamado al cura? ¿Ya has llamado al cura? ¡¡¡¿Pero como puede ser que lo tengas casi todo y no tengas cura?!!!

 ¡Pues síiii! Después de mucho tiempo: LLAMÉ AL CURA. A día de hoy aún no sabemos si nos va a casar él o no, ya que tendría que volver a llamarlo para confirmarlo, pero...... ¡buuuuuf! Tengo que pasar otra vez por "La Llamada". Así que nada, seguiré esperando a ver si en una de estas de tanto pensar en él y de tanto soñar que me lo encuentro en cualquier sitio, se da por aludido y me envía un SMS de confirmación: "Sí, te caso." ;)

Y el restaurante elegido es.... (redoble de tambores)

Era el primer día que buscábamos restaurante, habíamos concertado una primera visita a las 18'00h de la tarde, y una segunda visita a las 19'00h en otro restaurante. ¡Jamás imaginábamos que una visita iba a dar taaaaaanto de si! Madre mía, en la primera nos tuvimos que quedar más de una hora escuchando las mil historias "de una boda". Salimos de allí muy muy saturados de información, con la cabeza que nos estallaba (invitados por aquí, comida por allá, dj, baile, flores..... ¡¡aaaaaahhhh!!) Pero llegábamos tarde a la segunda visita, así que tuvimos que darnos prisa por llegar.

 Como que ya eran más de las 19'00h en pleno invierno, pues había anochecido. Así que la primera imagen que tuvimos al llegar fue la siguiente...

Mira que verse, se veía bien poquito, pero solo pisar ese sitio (me direis que estoy loca) me imaginé casándome allí. No sé bien que tenía aquel rincón perdido que me removió por dentro. El resto de la visita nocturna jajaja fue muy bien, Joan, el encargado nos hizo una explicación de todos los detalles. Imaginad nuestras cabezas que funcionaban a 1000 x hora, después de haber escuchado un super sermón bodorril, nos estábamos tragando otro, pero éste lo escuchamos con más ilusión.

Salimos muy contentos pero cansados, esperando un nuevo día (un poco más lejano, necesitábamos des-saturarnos de restaurantes) para hacer más visitas. Hay que decir que visitamos 2 restaurantes más, pero no sabemos porqué todos los íbamos comparando con "el restaurante - nocturno". En total vimos 4 restaurantes. Buscamos y buscamos información de otros, me dieron panfletos informativos de muchos más... pero, no, ninguno nos gustaba tanto.

 Hasta que un buen día, fuimos a la jornada de puertas abiertas que hacía "el restaurante - nocturno" para descubrir qué tal era de día. Y bueno que decir, si ya nos había gustado de noche, pues de día nos acabó de gustar mucho más. Así es como acabámos reservando día para.....

Esta es una selección de fotos que hice el día de puertas abiertas (hay que decir que nos pusimos las botas probando el aperitivo) así que si nosotros que somos unos "golafres" comimos muy bien, estamos segurísimos que vosotros también disfrutareis.

Y ahí va una fotillo de los novios felices de la vida en "su restaurante" ;)

¡Así cosía así, así! ¡Así cosía que yo la ví!

Pues sí, para eso están las vacaciones, para aprovechar el tiempo y ir preparando cositas. Pero para que quede constancia que no estoy sola en esto, que somos un equipo y ¡que los que nos casamos somos dos! jajaja Uno marca, la otra cose, el otro recorta... y así poco a poco con mucha paciencia, dedicación y ilusión estamos preparando todas las pequeñas cosas que formarán parte de ese día tan especial.

 ¿Que, qué es lo que estamos preparando? ¡No se puede contar! ¡Solo puedo decir que esta hecho con mucho amor! Y sé que aunque estemos preparando tantas cosas con  taaanta antelación (atención: solo quedan 8 meses, 3 semanas y 5 días, esto ya empieza a dar escalofríos jajaja) llegaran las semanas antes del día B y estaremos corriendo para arriba y para abajo corre que te corre porque faltarán cositas por acabar. Pero bueno, de hecho ¡estoy deseando que llegue ese estrés bodorril! Lo confieso.

Lo dicho, nosotros continuamos en nuestro tallercito como buenos currantes sin pausa pero sin prisa que aún queda mucho por preparar ;)